La Pancha Hernández
Con motivo de la sublevación del Nº 1 de Cazadores en San Luis, en 1820, marchó a Chile con el regimiento, acompañando a su marido, y algunos meses después en la expedición libertadora del Perú.
La Pancha acompañó a su marido en la expedición libertadora porque no quería quedarse sola en San Luis; entonces detrás del regimiento, y a la cabeza de los milicianos troperos que conducían las cargas y el ganado, apareció la Pancha, montada gallardamente, engalanada, como siempre, con su rojo pañolón de espumilla y luciendo a la espalda, su hermosa trenza renegrida.
El Regimiento de Granaderos a Caballo pasó la cordillera y en Rancagua, se incorporó al ejército Libertador, a medida que se terminaban los preparativos y se acercaba el plazo para zarpar de Valparaíso con destino al Perú. Estaba aterrorizada ante la idea de quedarse sola en tierra extranjera y por eso le surgió la idea de alistarse al ejercito como voluntaria; se sabía que el General San Martín no admitía mujeres en las expediciones, pero al ser conmovido por el rasgo de amor y de varonil entereza, aceptó su petición.Después del desembarco de Pisco y de la gloriosa campaña de la Sierra, realizada por el regimiento, debía asistir a la solemne entrada en Lima y participar de las expansiones del triunfo y de aquel hecho histórico, hecho memorable para los americanos.
También pudo decir, con legítimo orgullo, ante los coetáneos y su posteridad: - Yo fui, con mi marido, del Ejército Libertador.
La heroica Pancha, al lado de su esposo, había sufrido y triunfado hasta entonces, de la adversidad; pero, regresaría a Lima envejecida, agotada y mortalmente enferma.
Opinión personal.
Es tan increíble conocer a esta HEROÍNA puntana de la cual nunca había oido hablar. Estoy impactada; La Pancha es un claro ejemplo del poder femenino, el cual naturalmente esta considerado inferior. LAS MUJERES PODEMOS HACER TODO, solo necesitamos la oportunidad.